Parte cinco
A ponerse pañales
Andrés
sentía nervios por la invitación a usar pañales, algo que nunca había usado, al
menos, no tenía recuerdos, en ese momento recordó que pudo haberlos usado
cuando fue bebé, pero ahora, ya no, siendo un niño así de grande sería difícil
que le quedaran los pañales que usaban los bebés.
Entonces,
Andrés, dijo: me agrada que me valoren para este proyecto de amistad, pero no
sé si los pañales me queden, ya he crecido mucho.
Francisco
dijo: No te preocupes amiguito, justo ahora quiero que ustedes dos vean algo
bueno, eso les va a dar la confianza de que los pañales les podrán quedar.
Andrés
y Mark se quedaron observando a Francisco.
Francisco
se comenzó a bajar el pantalón que estaba usando, también su calzón de tela,
dejando ver un pañal para bebés, bien ajustado a su cintura, envolviendo toda
su zona genital, donde Andrés y Mark debieron haber visto su pene.
Andrés
se quedó sorprendido de ver que Francisco tenía un pañal puesto; Mark también
estaba sorprendido, tenía los ojos tan abiertos.
Seguido,
el otro niño llamado Félix también se bajó el pantalón y el calzón, dejando ver
el pañal que usaba, era el mismo que Francisco tenía puesto.
Andrés
tuvo una emoción tan grande y sincera, y fue que le había encantado ver las
piernas desnudas de Francisco y Félix. Pero en su interior sentía admiración
por el rostro de Mark, a pesar de terminar de verles los pañales a aquellos dos
chicos cuando se estaban subiendo la ropa, le gustaba el rostro de Mark.
Fue
ahí, cuando Andrés se sintió decidido a probar su primer pañal. Y les dijo que
sí a Francisco y Félix. Entonces, los
cuatro chicos se fueron hacia el interior, y Andrés se recostó en la mesita que
les serviría para ponerse los pañales.
Ahí,
Francisco dijo: Te vamos a quitar tus zapatos, tu pantalón y el calzón que
traes puesto, para que podamos ponerte el pañal, uno igual al que estamos
usando.
Andrés
se sintió muy nervioso, nunca había estado desnudo ante otros chicos, pero al
ver el rostro sonriente de Mark, como emocionado por la idea de que iba a estar
desnudo, entonces les dijo que sí.
Francisco
era el conocedor de cómo poner pañales, así que rápido le sacó los zapatos a
Andrés, y puso sus dos manos en los botones del pantalón a Andrés. A Andrés le
dieron cosquillas en su pelvis, pero se aguantó las ganas de reírse. Poco a
poco le fueron sacando el pantalón por las piernas, quedándose a la vista de
los tres chicos sus bonitas piernas, y el calzón color blanco que se puso por
esa mañana. Cuando Mark vio las piernas de Andrés, sintió una bonita sensación
en su interior.
Francisco
continuó en quitarle el calzón a Andrés, sintiéndose emocionado por verle su
pene, el que seguro sería muy bonito. Le puso las manos en el elástico de la
cintura, y lentamente se lo fue pasando por las piernas, ahora sí teniendo la
vista de ese hermoso miembro, flácido y con un bonito tamaño. Francisco puso la
prenda íntima de Andrés sobre el pantalón y Félix fue abriendo el pañal a todo
su tamaño. Andrés pidió ver el pañal que le iban a poner, por lo que Francisco
se lo dio, y Andrés fue viendo el algodón con mucho detenimiento; también lo
olió, sintiendo ese rico aroma. Entonces, Francisco y Félix levantaron las
piernas de Andrés sobre su pecho, teniendo a la vista sus bonitas pompas, bien
carnudas, alcanzándose a ver su ano, y bajo las pompas de Andrés le fueron
poniendo el pañal abierto. También poco a poco le fueron subiendo la parte
frontal del pañal. Cubrieron el bonito pene de Andrés con la parte frontal del
pañal y cerraron las cintas, haciéndolas tronar como cualquier cinta adhesiva.
Andrés
se puso de pie con el pañal puesto, bien adherido a sus entrepiernas y
envolviendo sus pompas. No pudo evitar no pasar sus manos por la cubierta del
pañal, respirando los aromas del perfume del pañal.
Entonces,
Francisco le dijo a Andrés: te ves muy bien con tu pañal, todas tus piernas y tus
pompas se ven diferentes, eres lindo.
Tras
ese halago, Mark estaba teniendo de nuevo sus sentimientos, y al ver a Andrés
con el pañal puesto, a pesar de no conocerlo mucho, le dijo: te ves muy bien
con ese pañal, eres un niño muy lindo.
Andrés
les dijo: Muchas gracias a los dos, se sintió bien que me pusieran este pañal.
Seguido,
fue el turno de Mark en ser puesto en pañales. Hicieron el mismo proceso de
sacarle toda su ropa, y cuando Andrés vio el pene de Mark, sintió mariposas en
su ser, su sonrisa se manifestó, no podía creer que se maravillaba por ver la
desnudez de un chico a quien apenas había visto por la calle, pero quien se le
había hecho muy lindo. Fue una bonita experiencia desde el principio con los
pañales, gracias a la invitación a pertenecer al club de los chicos lindos que
usaban pañales.
Andrés
se sentía bien siendo miembro del club, por haber sido puesto en pañal, ya era
uno del grupo. Así que ahí sonriente, feliz, permitió la experiencia de que sus
tres nuevos amigos le tocaran la parte frontal del pañal, sintió muchas
cosquillas por eso, y pasó lo mismo cuando le tocaron sus pompas envueltas de
ese delicioso algodón…